El seguro de viajes está ganando protagonismo con la pandemia. La llegada del nuevo año y la esperada mejora de la situación sanitaria con el avance de la vacunación todo apunta a que recuperaremos los viajes, tanto ocio como los profesionales. En la segunda mitad del pasado año, ya se registró un repunte de los viajes. Sin embargo, la llegada de la sexta ola y la irrupción de la variante ómicron supuso un nuevo retroceso en el número de viajes.

Los expertos ya han manifestado su confianza en que poco a poco vayamos recuperando los viejos hábitos, aunque el virus continuará entre nosotros y habrá de tomar precauciones.  Las cancelaciones a causa de nuevos brotes o que en caso de contagiarnos debamos renunciar a un viaje previamente programado seguirán formando parte de nuestra realidad por algún tiempo.

Durante todo este período, el seguro de viajes ha modificado algunas de sus coberturas para responder a los contratiempos surgidos a raíz de la pandemia. La contratación de una póliza de viajes garantiza, en la mayoría de los casos, la devolución del dinero en el caso de que no podamos viajar si nos hemos contagiado con el virus.

Otra cobertura habitual en este tipo de seguro es la de abonar los gastos de alojamiento si hemos de prolongar nuestra estancia a causa de un contagio o si se produce un confinamiento. En función de la póliza podemos encontrar otras garantías relacionadas con la atención sanitaria o la repatriación por causas médicas.

La mayoría de los seguros de viaje que podemos encontrar en el mercado ofrecen coberturas de responsabilidad civil ante posibles daños a terceros o indemnización en caso de pérdida o robo del equipaje.

Antes de viajar, consulta con tu mediador de seguros. Te asesorará sobre el seguro que mejor se ajuste a tus necesidades y te ofrecerá apoyo ante cualquier incidencia.